Puntos Claves de Oración para los Movimientos
– Por Shodankeh Johnson –
Un movimiento de plantación de iglesias no puede suceder sin un movimiento de oración primero. El pueblo de Dios necesita pasar tiempo en oración y ayuno. Debemos enseñar y entrenar a nuestros discípulos a orar fervientemente. Si esperamos algún éxito entre los no alcanzados, necesitamos un ministerio de oración y discípulos de oración. La oración es el motor de un movimiento, y la eficacia en la oración muchas veces depende de saber qué pedir.
Aquí están los doce principales puntos de oración que usamos en nuestro movimiento en África Occidental.
Oración:
- Para que Dios envié obreros a la cosecha. Por un aumento de hacedores de discípulos e intercesores.
«Es abundante la cosecha —les dijo—, pero son pocos los obreros. Pídanle, por tanto, al Señor de la cosecha que mande obreros a su campo. (Lucas 10:2 NVI)
- Para que Dios toque el corazón de las personas y las atraiga hacia Sí.
También Saúl se fue a su casa en Guibeá, acompañado por un grupo de hombres ilustres, a quienes el Señor les había movido el corazón. (1 Samuel 10:26 NVI)
—Dejen de murmurar —replicó Jesús—. Nadie puede venir a mí si no lo atrae el Padre que me envió, y yo lo resucitaré en el día final. En los profetas está escrito: “A todos los instruirá Dios”. En efecto, todo el que escucha al Padre y aprende de él viene a mí. (Juan 6:43-45 NVI)
El sábado salimos a las afueras de la ciudad, y fuimos por la orilla del río, donde esperábamos encontrar un lugar de oración. Nos sentamos y nos pusimos a conversar con las mujeres que se habían reunido. Una de ellas, que se llamaba Lidia, adoraba a Dios. Era de la ciudad de Tiatira y vendía telas de púrpura. Mientras escuchaba, el Señor le abrió el corazón para que respondiera al mensaje de Pablo. (Hechos 16:13-14 NVI)
- Por puertas abierta para el Evangelio.
Y, al mismo tiempo, intercedan por nosotros a fin de que Dios nos abra las puertas para proclamar la palabra, el misterio de Cristo por el cual estoy preso. Oren para que yo lo anuncie con claridad, como debo hacerlo. (Colosenses 4:3-4 NVI)
- Para encontrar personas de paz.
»Cuando entren en una casa, digan primero: “Paz a esta casa”. Si hay allí alguien digno de paz, gozará de ella; y, si no, la bendición no se cumplirá. Quédense en esa casa, y coman y beban de lo que ellos tengan, porque el trabajador tiene derecho a su sueldo. No anden de casa en casa. (Lucas 10:5-7 NVI)
- Para que se rompa toda Fortaleza y mentira del enemigo.
Pues aunque vivimos en el mundo, no libramos batallas como lo hace el mundo. Las armas con que luchamos no son del mundo, sino que tienen el poder divino para derribar fortalezas. Destruimos argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevamos cautivo todo pensamiento para que se someta a Cristo. (2 Corintios 10:3-5 NVI)
- Para que Dios les conceda audacia en compartir el Evangelio.
Ahora, Señor, toma en cuenta sus amenazas y concede a tus siervos el proclamar tu palabra sin temor alguno. Por eso, extiende tu mano para sanar y hacer señales y prodigios mediante el nombre de tu santo siervo Jesús». Después de haber orado, tembló el lugar en que estaban reunidos; todos fueron llenos del Espíritu Santo, y proclamaban la palabra de Dios sin temor alguno. (Hechos 4:29-31 NVI)
- Por una unción fresca y el poder del Espíritu Santo sobre los hacedores de discípulos.
“El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos” (Lucas 4:18 NVI)
Ahora voy a enviarles lo que ha prometido mi Padre; pero ustedes quédense en la ciudad hasta que sean revestidos del poder de lo alto. (Lucas 24:49 NVI)
Pero, cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra. (Hechos 1:8 NVI)
Y los discípulos quedaron llenos de alegría y del Espíritu Santo. (Hechos 13:52 NVI)
- Para que aumenten las señales los prodigios y los milagros.
Por eso, extiende tu mano para sanar y hacer señales y prodigios mediante el nombre de tu santo siervo Jesús. (Hechos 4:30 NVI)
Pueblo de Israel, escuchen esto: Jesús de Nazaret fue un hombre acreditado por Dios ante ustedes con milagros, señales y prodigios, los cuales realizó Dios entre ustedes por medio de él, como bien lo saben. (Hechos 4:22 NVI)
Ciertamente les aseguro que el que cree en mí las obras que yo hago también él las hará, y aun las hará mayores, porque yo vuelvo al Padre. (Juan 14:12 NVI)
My message and my preaching were not with wise and persuasive words, but with a demonstration of the Spirit’s power, so that your faith might not rest on human wisdom, but on God’s power. (1 Corinthians 2:4-5 NIV)
No les hablé ni les prediqué con palabras sabias y elocuentes, sino con demostración del poder del Espíritu para que la fe de ustedes no dependiera de la sabiduría humana, sino del poder de Dios. (1 Corintios 2:4-5 NVI)
- Por la protección de los trabajadores en el campo.
Los envío como ovejas en medio de lobos. Por tanto, sean astutos como serpientes y sencillos como palomas. (Mateo 10:16 NVI)
Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo —respondió él—. Sí, les he dado autoridad a ustedes para pisotear serpientes y escorpiones y vencer todo el poder del enemigo; nada les podrá hacer daño. (Lucas 10:18-19 NVI)
- Por recursos para el trabajo por hacer.
Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús. (Filipenses 4:19 NVI)
Y Dios puede hacer que toda gracia abunde para ustedes, de manera que siempre, en toda circunstancia, tengan todo lo necesario, y toda buena obra abunde en ustedes. (2 Corintios 9:8 NVI)
- Por la multiplicación que lleva a que los movimientos ardan en los corazones de las personas.
Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo. (Mateo 18:19-20 NVI)
Y la palabra de Dios se difundía: el número de los discípulos aumentaba considerablemente en Jerusalén, e incluso muchos de los sacerdotes obedecían a la fe. (Hechos 6:7 NVI)
Y los bendijo con estas palabras: Sean fructíferos y multiplíquense; llenen la tierra y sométanla; dominen a los peces del mar y a las aves del cielo, y a todos los reptiles que se arrastran por el suelo. (Génesis 1:28 NVI)
- Por otros movimientos y formadores de discípulos en todo el mundo.
Siempre damos gracias a Dios por todos ustedes cuando los mencionamos en nuestras oraciones. Los recordamos constantemente delante de nuestro Dios y Padre a causa de la obra realizada por su fe, el trabajo motivado por su amor, y la constancia sostenida por su esperanza en nuestro Señor Jesucristo. (1 Tesalonicenses 1”2-3 NVI)